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Squirting: Todo lo que necesitas saber

Esta de moda hablar de la eyaculación femenina, en especial desde que las productoras pornográficas lo convirtieron en un clásico más en sus películas hace unos años. Tanto es así que incluso que algunos hombres lo anhelan y lo persiguen ya que consideran, gracias a este tipo de films,  que es una muestra irrefutable de su buena labor como perfectos amantes. Pero lo cierto es que no hay que confundir la eyaculación femenina real  con lo que este tipo de industria se han empeñado en mostrar en sus producciones.

¿Qué es la eyaculación femenina o Squirting?

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Tal vez antes de adentrarnos en este complejo mundo del squirting, deberíamos explicar en que consiste. Lo cierto es que durante décadas nadie sabía explicar por que en algunas ocasiones se producía el squirting en el momento que una chica tiene un orgasmo. Muchos expertos desconocían exactamente de que estaba formado este fluido acuoso e incluso alguno de ellos defendían la idea de que en gran parte estaba formado por orina.

Pero estudios recientes del Doctor Salama han localizado la glándula de Skene, una especia de pequeña próstata en la mujer, al final de la uretra que es la que produce el squirt. Según estas investigaciones esta glándula es la responsable de la producción de dicho líquido justo en el momento del clímax y tras una correcta estimulación durante el coito.

Otro dato importante  es que se trata de una expulsión involuntaria de un fluido incoloro e inodoro  en el momento del clímax. Una eyaculación que no aporta más placer al momento, tan solo que ofrece unas sensaciones distintas al cuerpo de la señorita durante el orgasmo. Algo curioso y que puede aportar un toque de diversión y morbo al acto sexual.

Pocas chicas eyaculan durante el orgasmo

En oposición a lo que el mundo del porno nos dice, es realmente  poco frecuente este tipo de orgasmo femenino y cuando ocurre es una pequeña cantidad de líquido lo que se segrega. Aunque se sabe que casi todas las mujeres tienen la capacidad de hacer un squirting, se cree que por la educación recibida la mujer no «permite» que ocurre ya que se relaciona con la micción incontrolada. Control que se les exige desde que es muy niña, por lo que de forma inconsciente se suelen contraer los músculos del suelo pélvico lo cual lo hace incompatible con el squirting.

No confundamos realidad con ficción

Todos sabemos que una cosa es lo que ocurre en un plató y otra bien distinta lo que pasa bajo las sabanas de nuestras camas. Y es que en este tipo de películas la actriz tan solo simula eyacular, por ello se orinan o emplea algún tipo de deposito para verter el agua. Debido a estos trucos es tan espectacular la cantidad producida, así como la forma y velocidad con lo que es expelido.

Según el estudio publicado en International Urology and Nephrology cuando la señorita eyacula en  realidad la cantidad  expulsada va desde unas pocas gotas a 5 mililitro solamente.

Una vez más  la industria pornográfica distorsiona el sexo, por esta razón no debemos olvidar que sus películas son  una aproximación  muy lejana a la realidad. Una industria diseñada para ganar dinero pero no preparada para enseñar que es el sexo ni para mostrar en que consiste de verdad. Simplemente pensada en excitar y divertir, no debe ser tomada en cuenta  como referencia para nuestros encuentros íntimos ni mucho menos para que nos frute o imponga sus normas.

Formas de conseguir el Squirt

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Como ya hemos dicho ocurre en pocas chicas, incluso en aquellas que lo han podido disfrutar alguna vez, tampoco les ocurre con mucha frecuencia. Según los expertos depende de la excitación y factores psicológicos de la pareja en esa relación sexual. Por tanto podríamos decir, que esta condicionado primeramente por aspectos físicos y culturales del género femenino, y en segundo lugar por los psicológicos durante el coito. A veces ocurre y otras no, pero no por ello deja de ser igual de placentero tener sexo para ambas personas.

Pero si te apetece experimentarlo o si quieres controlarlo con práctica y esfuerzo a través del tiempo entonces debes escuchar a la sexóloga Ruth González. Según ella  con técnica y constancia puede llegar a ser casi voluntario con ejercicios durante la masturbación femenina. Según esta técnica  lo más importante es que intentes relajar los músculos del suelo pélvico que son aquellos que dejamos tensos para no orinar, además de haber bedido bastante agua un rato antes. Se debe focalizar la atención en la uretra, para  no apretarla, pues si esta  cerrado este conducto no podrá pasar el líquido segregado por las glándulas de Skene.

Cómo alcanzar el squirting > Pasos <

Qué hacer en primer lugar

Como para cualquier relación sexual hay que estar tranquilo, relajado y preparado para disfrutar.  Si no te encuentras en un óptimo estado mental no será posible alcanzar el clímax y mucho menos la eyaculación femenina (squirting). Ya sabes que es la mente es la que controla el cuerpo, por tanto nuestro primer consejo es que estés de ánimo para pasar un buen rato, sin preocupaciones o pensamientos que te alejen de tu objetivo. Y si hoy no es el día, mejor posponerlo para otro momento más idóneo.

En segundo lugar

Es importante  que tomes consciencia de tu lado más erótico para conseguir un squirting, es el momento de que dejes atrás complejos sobre tu cuerpo o tabús sobre el sexo. Mírate en el espejo y siente sexy con la ropa interior que elegiste o desnuda si es así como prefieres mostrarte a tu pareja. Limítate en centrarte en todas las sensaciones que tu pareja te está relajando y presta atención a tus sentidos. Huele, mira, saborea, escucha y siente como nunca lo hiciste antes…Abre tu mente.

Si permites que los pequeños placeres de ese momento inunden tu piel verás como tu cuerpo y tu sexo se despiertan preparándose para el mejor de los orgasmos. Si te dejas  llevar por la pasión y sensaciones del encuentro, verás que  la excitación y el placer se unirán de la mano. Descubre como los preliminares serán tu gran aliado, favoreciendo tu lubricación vaginal y facilitando tu dilatación tanto en  clítoris como vagina. Masajes, besos, caricias, risas…todo puede subir vuestra temperatura.

Un buen masaje en el clítoris también te ayudará

Ya que si este órgano no esta suficientemente excitado ni lo bastante estimulado será imposible alcanzar el momento del clímax. Podéis ir alternando  movimientos circulares con ligera presión sobre él. También es recomendable variar la forma de masajearlo en la punta o en la base del mismo, por ejemplo sujetándolo con dos dedos en lugar de con uno. Sin olvidar por supuesto diferentes presiones (desde muy suave a más enérgica) y velocidades, siempre de movimientos lentos a más rápidos.

Llegado el momento de la penetración recordar que también se puede acariciar la entrada de la vagina y su interior con los dedos o juguetes sexuales para mujeres. Los límites los ponéis vosotros, así que descubrir hasta donde queréis llegar y que te excita más. A mayor excitación más fácil será alcanzar la eyaculación en la mujer. No olvidéis el punto G, área que esta en el interior a 3-4 centímetros de la entrada,  no deja de ser otra zona del clítoris, pues la parte visible es solo una pequeña área de este órgano y el resto se encuentra ramificado en el interior de la chica. Sus ramificaciones internas van desde la vagina hasta el ano.

Una buena estimulación de esta zona aumentará la presión de las glándulas de Skene, que como comentábamos anteriormente son las encargadas de producir el líquido eyaculatorio. Por tanto lo ideal es el masaje externo junto con la estimulación interna… mientras recibes el pene no dejes de acariciar la zona externa del clítoris, labios y pubis en general. Y si no se produce de forma natural bastante lubricación en los genitales femeninos no dudéis en utilizar algún tipo de lubricante, pues si no existe humedad en el sexo de la mujer será muy molesto e incluso doloroso los juegos y caricias.

Y si puedes acompañar todo esto con movimiento pélvicos, mejor que mejor para el squirt.. Estos movimientos hacia delante de las caderas y contraer las nalgas aumentan la excitación, el grado de erección del clítoris y por tanto se alcanza mucho más rápido y con mayor intensidad el orgasmo. En ese punto será cuando puedas comenzar a sentir que el squirting está llegando. No lo confundas con ganas de orinar, no te alarmes ni contraigas la uretra o músculos pélvicos. No pares, sigue gozando mientras relajas los músculos y permite que ocurra mientras sientes estas nuevas sensaciones.

Para concluir podríamos añadir que es un fenómeno sexual que ha alcanzado máxima visualidad pública gracias al sector pornográfico ya que es un hecho sorprendente y excitante para gran parte de los hombres pero con poca importancia o relevancia para las mujeres. Algo que hace unas décadas ni se nombraba ni se conocía y que si ocurría podía humillar a la mujer pues se confundía con orina. Por tanto es un aspecto de la sexualidad femenina que no debe obsesionar ni a los hombres ni a las mujeres y  simplemente disfrutarlo  si ocurre.

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