La sexualidad es la columna vertebral de tu salud. El estrés laboral y las responsabilidades del hogar convierten tus encuentros sexuales en una rutina. La llama de la pasión se va apagando y la cama deja de ser un espacio excitante.
¿Cómo evitar que el aburrimiento se apodere de tu vida? El primer paso es dejar a un lado las inhibiciones. El erotismo se despierta con imaginación, por lo que hay que cambiar las reglas del juego.
El striptease es una opción maravillosa para estimular las fantasías. En este artículo te explicamos cómo desnudarte como toda una profesional.
Resumen del contenido
El arte del striptease
Aunque no lo creas, el baile sensual es una práctica milenaria. Los documentos sumerios evidencian su existencia desde el siglo III a. C. El primer striptease frente a un público, se llevó a cabo en 1893 en Moulin Rouge (París).
Con el paso de los años, nacieron múltiples musas especializadas en este arte. La hermosa Mata Hari deslumbraba a sus espectadores con sus bailes orientales. No tenía ningún tipo de pudor, se desnudaba envuelta en un aura de misterio. Los hombres caían rendidos a sus pies.
¿Quién no recuerda a la despampanante Kim Basinger, en la película 9 semanas y media? La escena donde ella se quita la ropa, al ritmo de la canción “You can leave your hat on” es un referente del cine erótico en los años 80.
Las mujeres no son las únicas protagonistas del striptease. Los hombres también pueden destacar en esta práctica excitante. La película Magic Mike lo confirma: sudor, músculos que se van develando a media luz. Un show lleno de sensualidad que eriza la piel.
Hasta ahora, hemos nombrado a grandes seductores de la historia. Sin embargo, no tienes que ser una gran actriz o una fem fatale para hacer un striptease. Cualquier persona tiene la capacidad de convertirse en una striper.
¿Quieres revelar tu lado más sexy? Aquí tienes nuestras recomendaciones y otras técnicas para hacer un baile sensual inolvidable.
Cómo hacer striptease
El striptease es uno de los juegos sexuales más populares entre hombres y mujeres. Aunque generalmente es realizado por profesionales en clubes nocturnos, tu misión es inyectarle a los espacios cotidianos una buena dosis de placer.
Reconoce tus puntos fuertes
Para ser sensual, debes conocer muy bien tu cuerpo. No importa qué edad tengas, cuál es tu talla o cuánto mides. Mírate al espejo y aprende a reconocer tus atributos. Ellos son tu arma secreta. No hay que tener una figura perfecta, ni ser un ícono de la belleza. La clave está en sacarle partido a las fortalezas para dejar a un lado todo aquello que no te hace sentir bien.
La confianza es lo más sexy que un hombre o una mujer puede tener. ¿Tienes curvas pronunciadas? No dudes en resaltarlas ¿Pechos muy grandes? Sácales partido con un buen escote ¿Algunos kilos de más? Déjalos fluir con una divertida lencería erótica.
Elige y prepara el escenario
Los sexólogos han demostrado que los problemas en las experiencias sexuales están estrechamente relacionados a los lugares donde se llevan a cabo. Es muy importante que renueves tu escenario de amor, añadiendo objetos, olores o estímulos visuales.
Para despertar la pasión adormecida, es necesario usar la imaginación. Elige un lugar diferente al dormitorio para hacer tu striptease. Cuanto más inusual e inesperado sea tu escenario, mayor dosis de sorpresa y adrenalina. Puedes convertir la sala o la cocina en un exótico ambiente para divertirte.
¿Cómo? Usa fuentes de luz suaves o indirectas para crear una atmósfera insinuante. También puedes utilizar otros elementos como velas aromáticas y modifica el orden de los objetos.
Planifica la privacidad con tu pareja. Si tienes hijos, asegúrate de hacer tu baile en un horario en el que no estén en casa o busca una niñera para esa ocasión especial. Es importante que nadie os moleste y podáis darle rienda suelta al placer.
Diseña tu imagen
El striptease está abierto a todo tipo de fantasías. Puedes optar por una lencería erótica convencional, con aplicaciones de encaje y texturas traslúcidas.
También es una oportunidad perfecta para disfrazarte, transformate en cualquier personaje: una enfermera sexy con ganas de jugar, una policía dispuesta a someter a los maleantes o una conejita caliente. Y si quieres ir más allá, puedes introducir accesorios de BDSM: un látigo, unas esposas o una atrevida máscara.
Selecciona prendas de vestir cómodas y fáciles de quitar. No es el momento para usar ropa ajustada, con una tela áspera o muchas capas. Si pasas mucho tiempo quitándote una blusa o un suéter, se rompe la magia. La idea es que el baile fluya de manera orgánica. La ropa debe facilitar el ritmo del striptease.
Aunque los tacones estilizan la figura y son un excelente fetiche para esta ocasión, asegúrate de poder caminar bien con ellos. Si pierdes el equilibrio, terminan arruinando el espectáculo. Te recomendamos que uses un peinado sencillo. Un moño es una buena opción, porque puedes soltarlo mientras bailas.
Los ojos y los labios son puntos focales estratégicos. Para resaltar tu mirada, aplica una sombra de tonalidad marrón sobre los párpados. Después, utiliza delineador negro y aplica una máscara de pestañas. Para que tus labios se vean más carnosos, utiliza un brillo de color claro.
Selecciona la música
La música debe ser sensual y envolvente. Selecciona una pieza que te haga sentir segura y sexy, algo con lo que puedas mover fácilmente tus caderas. Evita los ritmos demasiado acelerados que puedan dañar el ambiente. Usa un volumen moderado, recuerda que la música no debe robar el show. Debe ser un ayudante para que seas tu la protagonista.
Ensaya tus pasos
No se trata de ser una bailarina experta, se trata de establecer un vínculo ardiente con tu amante. Si eres principiante, te recomendamos ensayar tu baile. Es imprescindible que tengas la seguridad necesaria para que puedas irradiar toda tu pasión.
Pasos básicos para volver loca a tu pareja
- No te apresures, debes ir lentamente. Empieza de espaldas, moviendo tus caderas al ritmo de la música.
- Acompaña el vaivén de tus caderas, moviendo tus hombros en círculos alternativamente y hacia atrás. Primero un hombro y luego el otro, la clave está en coordinarlos con tus caderas.
- Realiza una ligera torsión de espaldas, para mostrar tu perfil y lanzar una mirada fulminante.
- Pon tus manos en la cintura y flexiona las piernas para deslizarte hacia abajo. Hazlo poco a poco para que tu pareja pueda disfrutar de los movimientos. Cuando estés abajo, vuelve a subir lentamente. Puedes repetir este movimiento dos o tres veces.
- La temperatura ya está subiendo, ahora gira tu cuerpo 90 grados y deja la pierna que está más cerca de tu amante por delante. Inclina tu pecho hacia el suelo y acaricia tus piernas hasta donde puedas. Cuando te incorpores, aprovecha la ocasión para acariciar tus nalgas.
- Ponte cara a cara con tu pareja. Sin dejar de moverte, hazte caricias por todo el cuerpo hasta que llegues a tu cabeza. Juega con tu pelo como quieras, si tienes un moño puedes soltarlo.
- Este es el momento perfecto, para empezar a jugar con tu ropa. Puedes subirte un poco la camisa, deja caer un tirante, quita algunos botones. No lo enseñes todo a la primera, el truco es crear expectativa.
- Aprovecha para quitarte lentamente la camisa. No pierdas el contacto visual, sonríe con picardía y deja que la prenda caiga sensualmente al suelo.
- No dejes que tu compañero te toque, ahora que está más caliente aléjate. Sigue bailando, puedes utilizar una silla o cualquier otro objeto para apoyar tus movimientos. Muéstrate sin pudor, tus caderas deben desafiarlo y excitarlo.
- Estás en el punto climático. Sin perderlo de vista, desabrocha tu sostén. Tiráselo con delicadeza.
- Baja tus bragas poco a poco, puedes hacerlo de pie o sentada. Deslízalas con tu pie, hasta quedar desnuda.
- Acércate con movimientos sensuales y dale un beso apasionado.
- Deja que las emociones se desborden y disfruta.